El fiscal César Augusto Troncoso pidió que Pablo Echarri, Martín Seefeld, Pepe Soriano, Osvaldo Santoro y Jorge Marrale (integrantes de SAGAI –Sociedad Argentina de Gestión de Actores Intérpretes–), sean citados a indagatoria por sospechar que tuvieron una administración fraudulenta de fondos de la entidad.
Dicho pedido surge luego de que dos socios de SAGAI pidieran una investigación aduciendo que los miembros de la directiva tomaron una decisión que perjudicó el patrimonio de la entidad. Esto se remonta a una demanda entablada contra DirecTV, por el no pago de regalías por la ley de derechos de autor. Dicho conflicto fue ganado por SAGAI en primera instancia, y debía cobrar $454 millones por parte de la señal satelital. Sin embargo, tras un acuerdo extrajudicial, el monto se redujo a $111 millones. Por esto, también el pedido de indagatoria recae sobre el abogado Sebastián Bloj.
En caso de que la jueza que entiende en la causa, Karina Marina Zucconi, acepte el pedido del fiscal, tanto Echarri como Seefeld y el resto de la directiva deberán ir a declarar en una causa que puede tener penas de hasta cuatro años de prisión.
Haciendo lugar a la demanda interpuesta por Mario Galvano -socio de SAGAI- que pedía a la justicia que investigue a la comisión directiva de la entidad, el fiscal Troncoso le dijo a la jueza Zucconi que según su criterio, Soriano, Marrale, Santoro, Seefeld, Echarri y Bloj "deberán ser indagados por el presunto delito de administración fraudulenta por haber adoptado una decisión patrimonial en nombre de SAGAI perjudicando los intereses de sus socios sin que estos puedan haber votado y decidir en asamblea cuál era la decisión que mejor se adecuaba a sus intereses".
"Había una sentencia en primera instancia que planteaba un embargo millonario y, sin consultar con los socios, la comisión directiva acordó una suma cuatro veces inferior. La Comisión Directiva había realizado anteriormente Asambleas Extraordinarias de SAGAI para que sus socios aceptaran o no una donación a la obra social de actores por un millón de pesos, por ejemplo. Otra Asamblea Extraordinaria fue llamada para que se aceptara liquidar una hipoteca sobre el edificio de la entidad por cuatro millones de pesos. Otra Asamblea Extraordinaria fue llamada para que se aprobara una dieta para los miembros de la directiva. ¿Y no se llamó a una Asamblea Extraordinaria para que los socios decidieran si querían condonar más de 300 millones de pesos a DirecTV?", dijo el abogado de Galvano.