La chica de 14 años que denunció haber sido violada por un grupo de cinco amigos en un camping de Miramar declaró este viernes (04/01) en Cámara Gesell. En su relato, la joven habría ratificado los hechos que tuvieron lugar la madrugada del 1 de enero. Así se desprende de las declaraciones de la fiscal Florencia Salas, quien aseguró que "la hipótesis se mantiene incólume".
"La hipótesis fiscal se mantiene incólume, no se va a variar a raíz de este testimonio", expresó Salas sin brindar más detalles sobre los dichos de la menor. De esta forma confirmó que los cinco amigos continúan siendo acusados por "abuso sexual con acceso carnal agravado".
Según trascendió, la chica declaró alrededor de 50 minutos, y antes de ingresar estuvo en contacto con una psicóloga durante una hora. La fiscalía mantuvo en secreto la hora y el día de la declaración para preservar la identidad de la víctima.
Además de los resultados de la Cámara Gesell, la fiscal espera las pericias sobre el camping "El durazno", y los exámenes de sangre sobre los imputados, además del toxicológico y el análisis de ADN de cada uno de ellos.
A su vez, el juez Saúl Errandonea autorizó el análisis de los celulares de los cinco acusados de violar a la menor, básicamente para comprobar si el ataque fue premeditado.
La violación ocurrió durante la madrugada de este martes en el complejo turístico "El Durazno", sobre el kilómetro 1 de la Ruta 11, donde la chica había ido a pasar el Fin de Año junto a su familia. Según la denuncia que los padres de la adolescente realizaron en la Comisaría de la Mujer de General Alvarado, en algún momento de la noche notaron que ella no estaba y comenzaron a buscarla dentro de las instalaciones. Más tarde la encontraron en una carpa ubicada en otro sector del balneario, rodeada de los agresores, que por decisión de la justicia continuarán en prisión, en la Unidad Penal 44 de Batán.