Como se esperaba, ayer 826/5) el juez Sebastián Casanello rechazó la recusación presentada por Leandro Báez, uno de los hijos del empresario Lázaro Báez que argumentó que el magistrado estaba redireccionando la investigación para proteger a Máximo y a Cristina Kirchner. El juez apeló a duros argumentos y luego partió a Suiza junto con el fiscal Guillermo Marijuan a acelerar los exhortos pendientes en busca de información sobre las cuentas y empresas investigadas en la causa.
Pero no todo terminó allí para Leandro, si bien Casanello rechazó de plano el pedido de recusación, Marijuan dejó una puerta abierta: le ofreció declarar como “colaborador”, una figura con las garantías del programa de testigo protegido similar al que tiene el valijero Leonardo Fariña, con el objetivo de que aporte información.
"Toda vez que el Sr. Leandro Báez a lo largo de su presentación por escrito refiere y se muestra quejoso en punto a que la investigación no avanza respecto de personas y/o ex funcionarios públicos, descargándose toda la responsabilidad, según su particular punto de vista, en su padre y grupo familiar, debe señalársele que se encuentran plenamente vigentes para que se extienda en su versión, los artículos 73 y 279 del CPP y la figura de colaborador en los términos de la Ley de Blanqueo de Capitales", fue la respuesta del fiscal en su dictamen a las críticas, según cita este viernes (27/5) el portal Infobae.
Leandro no esta imputado en el expediente, se presentó en la causa ayer (26/5) y criticó que las acusaciones en el expediente solo lleguen hasta su padre y su hermano Martín y no se investiguen a los funcionarios del gobierno de la expresidente Cristina Kirchner.
El hijo de Lázaro presentó un escrito donde solicitaba a Casanello dar un paso al costado en la investigación de lavado de dinero, más conocida como "Ruta del dinero K".
Si bien el funcionario judicial rechazó las acusaciones del hijo menor de los varones Báez, éste aún podría apelar y definiría la Cámara Federal.