Sorprende cuando una instrucción bien realizada no prospera en tiempo y forma en la instancia del Juzgado. En el expediente de marras, el problema se fundamenta en quien era el magistrado: Omar Aníbal Peralta, ya apartado del Juzgado Nacional en lo Criminal y Correccional N° 7 de la Capital Federal.
Es cierto que hay colapso administrativo, con cierta frecuencia, para preocupación de todos los damnificados. Pero la actuación de la Fiscalía Nacional en lo Criminal de Instrucción N 26 que conduce Patricio Lorenzo Lugones, había resultado impecable, y las pericias fueron concluyentes.
El asunto de la sucesión de Nicolás Nicola es un escándalo que involucra a Stelle Rodriguez, Nicolás Arjovsky y Claudio Picardi.
Correspondería, de acuerdo a la lectura pormenorizada del expediente, el llamado a indagatoria y el procesamiento de los imputados, luego de la feria judicial de invierno.
La actuación de Peralta ya había quedado en evidencia en aquel caso de la presentación del Dr. Jorge Manuel Kabakian, quien denunció a Peralta cuando era juez subrogante del Juzgado Nacional de Primera instancia en lo Criminal de Instrucción Nº 2, por “mal desempeño en el ejercicio de la función”.
En noviembre de 2017, Peralta decidió apartarse.
Quedó a cargo del 7, en calidad de subrogante, Ángeles Mariana Gómez Maiorano, jueza del Juzgado Nacional en lo Criminal y Correccional Nº49 de la Capital Federal.
Gómez Maiorano tuvo destacadas actuaciones, cuando era abogada, en casos de violencia de género.
La Secretaría a cargo la cumple en forma interina Silvia Beatriz Damiano.
Los rumores acerca de la estrategia de los responsables de la maniobra dolosa son macabros y es de esperar que sólo resulten versiones en la disputa por el control de bienes. Los elementos que constan en la instrucción resultan harto delicados.
La evolución de la causa en el fuero penal se sigue con atención en el Juzgado Civil 15, a cargo del también subrogante Marcelo Luis Gallo Tagle, conocido por su desempeño tanto en la Asociación de Magistrados como en la Lista Bordó (cuando la causa comenzó estaba a cargo la hoy camarista María Isabel Benavente).