Domingo Bulacio, conocido por sus vecinos como "el Monstruo de Villa Balnearia", violó a su hija durante 20 años y en ese tiempo tuvo 8 hijos con ella. La Justicia santiagueña lo sentenció a 12 años y 8 meses de prisión.
Durante el juicio los psicólogos coincidieron en destacar el desastre al que Bulacio había arrastrado a todos, sometiéndolos al analfabetismo, la desnutrición, incesto, precariedad y sumisión absoluta.
Según publica el portal de TN, recién cuando la víctima sospechó que su padre también había abusado de uno de sus hijos fue que se animó a romper el silencio. Lo hizo ante un grupo de médicos comunitarios de Las Termas de Río Hondo.
Bulacio se enteró de la denuncia y logró mantenerse 45 días prófugo, escondido en la casa de unos familiares, 58 kilómetros al sur de la capital de la provincia. Mientras tanto, la investigación avanzaba y ya habían determinado a través de los estudios de ADN la paternidad de los ocho hijos de la víctima.
Lo detuvieron finalmente hace dos años y está preso desde entonces. Durante el proceso se negó a declarar, pero sí se escucharon los testimonios de más de 50 personas que no dejaron espacio para la duda. Fue encontrado culpable del delito de "abuso sexual con acceso carnal gravemente ultrajante agravado por el vínculo”.
La madre y los chicos viven actualmente en un rancho, en condiciones de extrema pobreza y soportando además, los ataques de la familia del condenado, que vive a pocos metros de distancia.
Según relataron medios locales, Bulacio había comenzado a violar a su hija, de entonces 15 años, tras expulsar del hogar a su mujer.