Mañana (20/4) se cumplirá una semana sin noticias del paradero del abogado Jorge Chueco, vinculado al empresario detenido Lázaro Báez y pieza clave en el entramado de lavado de dinero conocido como la Ruta del Dinero K. A pesar de que en un principio la hipótesis del suicidio era la más fuerte, ya son dos los testigos que indican que Chueco habría salido del país hacia Ciudad del Este, previo paso por Foz de Iguazú, Brasil.
El primer testigo que sustentó la teoría de la fuga fue el chofer de un ómnibus que une Puerto Iguazú con Foz.
Ahora se sumó (anoche 18/4) el testimonio de un inspector de la misma empresa de micros, que también dijo haber visto a Chueco subir al colectivo en la terminal de Puerto Iguazú, a pocos metros de los hoteles donde se alojó desde el martes pasado y bajar en el centro de frontera para hacer los trámites migratorios, junto con otros pasajeros.
Pero falta el registro de la salida de Chueco del país, que no registrada, con lo que se presume que habría tenido que utilizar una identidad falsa.
Los dos testigos coinciden en que el abogado, apoderado de "Helvetic Service Group SA", la empresa que estaba detrás de SGI, la financiera conocida como "La Rosadita", vestía jean y una remera celeste o azul claro y no llevaba ningún bolso o mochila.
El chofer había dicho que el hombre se bajó en la última parada, cerca al Puente de la Amistad, que une Foz de Iguazú con Ciudad del Este, Paraguay.
Según indica el diario Clarín, el juez Osvaldo Rubén Lunge tiene en su poder las filmaciones de las cámaras de seguridad de la Policía de Brasil. De un primer análisis surge que un hombre con ropas idénticas a las descriptas por el chofer, descendió en el lugar indicado, pero aseguran que la imagen no tiene la nitidez necesaria como para confirmar que se trata de Chueco.