Este jueves (21/09) sorprendió la noticia de que los abogados de Julio De Vido habían presentado la renuncia en todas las causas en las que el ex ministro está imputado. Esta decisión era llamativa sobre todo a la luz de que en 6 días está previsto el inicio del juicio oral por la 'Tragedia ferroviaria de Once'. "Lo hace para dilatar el juicio, De Vido sabe que no tiene con que defenderse", había afirmado al respecto María Luján Rey, madre de una de las víctimas del choque del Sarmiento.
Sin embargo, si ésta era una estrategia judicial para que se postergue el juicio, no le dio resultado: según señalaron fuentes judiciales, a raíz del apartamiento de la defensa de De Vido no se suspenderá el inicio del juicio oral por su responsabilidad en la tragedia ferroviaria de Once, que tiene fecha fijada para el 27 de septiembre a las 9.30.
De hecho, según trascendió, el TOF 4 intimará al ex ministro a que en 72 horas nombre nuevos abogados, sino le dispondrán una defensa oficial.
En su renuncia, los abogados habían argumentado que en las condiciones en las que avanzaron las causas contra De Vido "carece de sentido prestarse a ese juego y ofrecer el ejercicio profesional de estos defensores, cuya presencia en ese juicio solo completaría el mínimo ritualismo formal que la justicia ha aceptado cumplir", indicando que "hay un rechazo sistemático" a las presentaciones realizadas.
La defensa de De Vido presentó su renuncia a todos los expedientes que se encuentran en los diferentes juzgados de Comodoro Py esta mañana. Si bien en la mayoría de las causas, sólo argumentaron que el alejamiento se debía a "motivos particulares", en la causa por su su responsabilidad en la Tragedia de Once los abogados ampliaron los argumentos se su alejamiento, según el escrito al que accedió Clarín.
Las acusaciones que recaen en dicha causa sobre el diputado del FpV son por "administración fraudulenta en perjuicio del Estado con estrago culposo agravado por la muerte de 51 personas, más una por nacer y lesiones que sufrieron 789 personas”.
En este caso y con el juicio oral a cargo del TOF 4 en puerta, la defensa planteó que dicha instancia "vulneran todos los mandatos constitucionales que regulan el proceso penal y el derecho de defensa en juicio" y el estudio de abogados consideró que la situación"no está a la altura de las relevancia del suceso que se investiga".
Asimismo, en el escrito presentado los abogados que dejaron de representar al ex funcionario K, indicaron que "el desarrollo del proceso se reduce a un ritualismo vacío que tiene por objeto sólo la condena de Julio De Vido. Ello funda la conciencia de la imposibilidad del ejercicio pleno y regular de la defensa en juicio".
En este sentido, los abogados remarcaron: "Nuestro cliente fue traído a esta instancia a consecuencia de acusaciones construidas en un juicio anterior del que no fue parte y en el que no tuvo oportunidad de defenderse".
Por ello consideran que los cargos se le trasladaron en "forma automática" hacia el ex ministro y la defensa sólo se"encontró con una sistemática negativa a examinar sus planteos, proveer las pruebas que requería y atender a sus pedidos de revisión de las decisiones adoptadas".
En este punto agregaron que todos los intentos de "ejercer su defensa material" tuvo como respuesta "sucesivos rechazos in limine dispuestos por el juez de grado y confirmados en instancias superiores, siempre en forma dogmática, vacíos de toda motivación o con motivación aparente".
En la instancia final del planteo, los abogados Maloneay, Virgolini y Silvestroni remarcaron que la renuncia a la representación de De Vido "se trata de una decisión dolorosa, pero necesaria porque responde a la excepcionalidad de una realidad que jamñas, en largos años de profesión, e incluso de magistratura en el caso de uno de los firmantes, habíamos presenciado en la República Argentina".
El planteo se hizo "extensivo" a las demás causas en las que consideraron, "se violó el ejercicio pleno de defensa" ya que se encontraban con un "rechazo sistemático a todos los planteos realizados por la defensa".