Cada 29/8 se celebra el Día del Abogado, en homenaje al nacimiento de Juan Bautista Alberdi, abogado, político, diplomático y escritor argentino, nacido el 29/8/1810, en San Miguel de Tucumán.
La Junta de Gobierno de la Federación Argentina de Colegios de Abogados (FACA) eligió la fecha para recordar a Alberdi y comenzó a celebrarse en 1958, con la presidencia de Arturo Frondizi.
En 1831 ingresó en la Universidad de Buenos Aires en la carrera de Leyes y siguió sus estudios en la Universidad de Córdoba, donde obtuvo su título de Bachiller en Leyes. Mientras se encontraba en Chile, revalidó su título y ejerció como abogado.
Alberdi, en Buenos Aires, se unió al Salón Literario en 1835, fundado por Marcos Sastre. También participaban Juan María Gutiérrez, José Mármol, Miguel Cané (padre), entre otros jóvenes, con los que se vinculó a la Generación del 37, opositores al gobierno de Juan Manuel de Rosas.
Este grupo de intelectuales comulgaban con las ideas de la democracia liberal y continuaron con la obra de la Revolución de Mayo.
Mientras estudiaba, en 1837, publicó un análisis sobre la situación del país y las posibles soluciones, conocida como el Fragmento Preliminar al Estudio del Derecho. Esta obra dio origen al historicismo jurídico argentino, una doctrina que consideraba al sistema jurídico como un elemento dinámico y progresivo de la vida social.
Como Alberdi se oponía a Rosas, se negó a prestar juramento a su gobierno en 1838. En consecuencia, se disolvió el Salón Literario y se formó la logia llamada 'La joven Argentina'.
Con motivo de la persecución llevada a cabo por Rosas y la fuerza parapolicial de la Mazorca, creada por el gobernador, Alberdi se exilió en Montevideo, Uruguay. Allí trabajó como abogado y periodista, y también escribió sus 2 obras de teatro llamadas La Revolución de Mayo y El gigante Amapolas, sátira sobre el régimen rosista y caudillista.
Su obra más conocida es 'Bases y Puntos de Partida para la Organización Política de la República Argentina', utilizada como base para la Constitución Argentina de 1853 y escrita después de la Batalla de Caseros, en 1852.
Durante la presidencia de Justo José de Urquiza, le ofrecieron ser ministro de Hacienda de Argentina, pero lo rechazó. Sin embargo, aceptó ser diplomático en Europa a partir de 1855 con el objetivo de obtener en Europa el reconocimiento de la Confederación Argentina bajo la nueva Constitución y evitar el reconocimiento del Estado de Buenos Aires como nación independiente, ya que en aquel entonces estaba separado de la Confederación. Alberdi cumplió.
Cuando Bartolomé Mitre asumió como presidente, después de vencer a Urquiza en la Batalla de Pavón, Alberdi regresó al país. En 1878 fue elegido diputado por su provincia y, en aquella época, fue nombrado doctor honoris causa por la Facultad de Derecho de la Universidad de Buenos Aires.
Años depués, el presidente Julio Argentino Roca lo nominó para ser embajador en Francia, pero por diferencias políticas no obvtuvo la aprobación del Congreso. Alberdi decidió exiliarse en Francia, y falleció el 19/6/1884 en Neuilly-sur-Seine, suburbio de París, cuando tenía 73 años.